La Selección Argentina Sub 20 hizo historia en Santiago de Chile y se clasificó a la gran final del Mundial de la categoría tras vencer por 1-0 a un duro equipo colombiano. En un partido vibrante, cargado de emociones, momentos tensos y actuaciones individuales destacadas, los dirigidos por Diego Placente dieron una verdadera muestra de carácter y fútbol para meterse nuevamente en la definición del título, algo que no sucedía desde hace 18 años.

Con una notable actuación colectiva en el segundo tiempo y un nivel superlativo de Gianluca Prestianni, sumado a las atajadas determinantes de Santino Barbi y un gol decisivo de Franco Silvetti, la Albiceleste se aseguró un lugar en la final que se jugará este domingo contra Marruecos a las 20 horas. El objetivo: sumar la séptima estrella en esta categoría, tras los títulos obtenidos en 1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007.


Un primer tiempo áspero y parejo

Desde el inicio, el encuentro prometía ser intenso. Con mucho en juego y dos selecciones de fuerte personalidad, los primeros 45 minutos se jugaron al límite. Los roces y choques estuvieron a la orden del día, pero eso no impidió que ambos equipos generaran situaciones de peligro. El trámite fue equilibrado, aunque a la Argentina se la notó algo incómoda, posiblemente por la ausencia del suspendido Maher Carrizo, pieza clave en el mediocampo.

La presión de Colombia, sumada a un planteo inicial que no terminó de cuajar, hizo que Argentina no encontrara claridad en la generación de juego. Sin embargo, el equipo supo resistir y sostenerse gracias a una defensa firme y un arquero, Santino Barbi, que volvió a demostrar su enorme nivel, manteniendo por cuarta vez consecutiva el arco en cero.


Ajustes tácticos, cambios y una segunda mitad distinta

En el entretiempo, Placente movió el tablero. Ordenó el ingreso de Silvetti y Andrada en lugar de Subiabre y Acuña, y lo más importante: reubicó a Tomás Pérez, quien dejó su rol de líbero para colocarse como volante central, su posición más natural. Esta modificación liberó a Argentina y le permitió asumir una postura más ofensiva, con mayor verticalidad.

Con una línea defensiva más tradicional y un mediocampo más dinámico, los laterales Gorosito y Soler redujeron sus proyecciones, pero el tridente ofensivo integrado por Prestianni, Silvetti y Sarco encontró mayores espacios para explotar su velocidad y capacidad asociativa.

Fue en este contexto donde Prestianni se transformó en figura indiscutida. Encendido, encarador y lúcido, comenzó a ser el eje de todas las jugadas ofensivas. Asistió dos veces de forma magistral a Silvetti, aunque en ambas oportunidades el ex Newell’s —actual jugador del Inter Miami— definió desviado.


Barbi salvador y la genialidad que definió el partido

Mientras Argentina empujaba, también dejó algunos espacios atrás, y Colombia aprovechó para generar peligro. Allí apareció la figura de Barbi, quien sostuvo al equipo con dos atajadas de altísimo nivel que evitaron el gol rival. En otra jugada clara, fue Juan Villalba quien se arrojó con todo para bloquear un remate dentro del área, en una acción tan épica como crucial.

En un momento caliente del partido, con Colombia presionando, Placente recurrió a un recurso estratégico: pidió la revisión de una jugada mediante tarjeta verde. El análisis posterior reveló un leve codazo de Villalba, que finalmente no fue sancionado. Pero lo que sí logró el DT fue enfriar el ritmo del juego y recuperar el control emocional del equipo.

Y fue entonces, a los 72 minutos, cuando se produjo el quiebre. Prestianni, con una acción digna de potrero, encaró, arrastró marcas y asistió por tercera vez a Silvetti. Esta vez, el delantero no perdonó y definió con precisión para marcar el único tanto del encuentro. Una jugada de laboratorio, pensada y trabajada durante el entretiempo, que tuvo como cómplice a Sarco, quien también fue clave al arrastrar la marca para liberar a su compañero.


Colombia con uno menos, y Argentina aguantando

Con el gol a favor, la Albiceleste ganó en confianza. Colombia, en tanto, comenzó a perder el control. A los 79 minutos, Rentería fue expulsado por doble amarilla tras una acción innecesaria, y su equipo quedó con diez hombres. A pesar de la inferioridad numérica, el conjunto cafetero intentó sin claridad. Argentina, por su parte, pudo haber liquidado el partido en los pies de Sarco, pero falló en la definición.

Los últimos minutos estuvieron cargados de tensión, más por el nerviosismo que genera un resultado corto que por las acciones concretas del rival. El árbitro fue llamado para revisar una fuerte infracción de Gorosito, que por poco no terminó en tarjeta roja, pero finalmente la sanción quedó en amarilla.


El sueño sigue: Argentina, finalista y en busca de la séptima

Con el pitazo final, se desató el festejo de un equipo que crece partido a partido. La Selección Sub 20 demostró madurez, inteligencia táctica y capacidad individual en los momentos justos. Con un arquero imbatible, un mediocampo que supo reinventarse y un Prestianni descomunal, el equipo de Diego Placente se ganó merecidamente su lugar en la final.

Este domingo, frente a Marruecos, Argentina irá en busca de su séptimo título mundial en la categoría, con la ilusión intacta y un plantel que ha demostrado estar a la altura de la historia.

octubre 16, 2025