El Teatro Colón es reconocido en todo el mundo como uno de los grandes templos de la música y las artes escénicas. Su imponente arquitectura, su acústica excepcional y su ubicación privilegiada en el corazón de la Ciudad de Buenos Aires lo convierten en un símbolo indiscutido de la cultura argentina. Sin embargo, más allá de sus muros centenarios y de su belleza material, existe un elemento esencial que le da sentido y continuidad: los Elencos Estables. Al cumplirse cien años de su creación, el canal TN estrenó un documental especial que propone un recorrido por la historia, el presente y los desafíos futuros del Ballet, la Orquesta y el Coro del Teatro Colón, verdaderos pilares de la institución.
La conformación de los Elencos Estables, hace un siglo, marcó un punto de inflexión en la historia del teatro. En una época en la que muchas salas líricas del mundo dependían de compañías extranjeras o elencos temporarios, el Colón decidió apostar por la formación de cuerpos artísticos permanentes. Esta decisión no solo fue audaz, sino también visionaria, ya que permitió desarrollar una identidad propia y consolidar un nivel artístico que, con el tiempo, alcanzaría estándares internacionales de excelencia.
Desde entonces, músicos, bailarines y coreutas han sido los protagonistas silenciosos de innumerables funciones memorables. Son ellos quienes transforman el edificio en un espacio vivo, donde la historia no se conserva de manera estática, sino que se renueva función tras función. A lo largo de cien años, los Elencos Estables atravesaron distintos contextos políticos, sociales y culturales, adaptándose a cada época sin perder el compromiso con la calidad artística.
El documental de TN pone el foco en esas trayectorias colectivas y personales, recuperando testimonios, imágenes de archivo y reflexiones de figuras clave vinculadas al Teatro Colón. A través de este material, se evidencia que las compañías estables no solo fueron fundamentales para el desarrollo del teatro, sino que también contribuyeron de manera decisiva a posicionar a la Argentina en el mapa cultural internacional.
Gerardo Grieco, Director General del Teatro Colón, destaca en el documental la dimensión simbólica y cultural que adquirió la institución a lo largo del tiempo. Para él, el Colón supera ampliamente su condición de emblema porteño y se proyecta como un patrimonio de valor universal. “El Teatro Colón no es solo de Buenos Aires; es patrimonio de la humanidad”, afirma, subrayando que el teatro funciona tanto como una puerta de entrada a la cultura argentina para quienes visitan la ciudad, como una marca reconocida a nivel mundial por su excelencia artística.
Esa proyección internacional se sostiene, en gran medida, gracias al trabajo continuo de los Elencos Estables. La Orquesta, el Coro y el Ballet no solo interpretan las grandes obras del repertorio clásico, sino que también asumen el desafío de dialogar con nuevas propuestas, directores y coreógrafos contemporáneos. En ese equilibrio entre tradición e innovación reside una de las claves del prestigio del Colón.
La celebración del centenario no se plantea únicamente como una mirada nostálgica hacia el pasado. Por el contrario, el aniversario invita a reflexionar sobre el presente y, especialmente, sobre el futuro de la institución. Esa perspectiva es compartida por Julio Bocca, actual Director Artístico del Teatro Colón y una de las figuras más influyentes de la danza argentina a nivel internacional.
Bocca, cuya carrera estuvo marcada por la disciplina, la exigencia y la búsqueda permanente de excelencia, aborda este momento histórico con una visión clara y pragmática. Reconoce la importancia de celebrar los cien años de los Elencos Estables, pero advierte sobre el riesgo de quedarse anclados en los logros del pasado. “Festejar y recordar es necesario, porque cien años representan un recorrido enorme. Pero este aniversario también debe servir para pensar en los próximos cien años”, señala con naturalidad en diálogo con TN.
Su mirada refleja una concepción del arte como un proceso dinámico, en constante evolución. Lejos de las declaraciones grandilocuentes, Bocca propone un trabajo sostenido y una planificación a largo plazo que permita consolidar al Teatro Colón como un referente cultural del siglo XXI. Para él, el desafío consiste en preservar la herencia artística recibida sin dejar de impulsar nuevas formas de expresión y de formación para las futuras generaciones.
Quienes han seguido su trayectoria saben que Bocca siempre priorizó el trabajo riguroso por sobre el reconocimiento público. Esa misma filosofía intenta aplicar ahora desde su rol institucional, impulsando una gestión artística que combine respeto por la tradición, apertura a la innovación y compromiso con la calidad. En ese sentido, el centenario de los Elencos Estables se convierte en una oportunidad estratégica para redefinir objetivos, fortalecer la identidad del teatro y proyectarlo hacia el futuro.
Así, los cien años de los Elencos Estables del Teatro Colón no representan solo una efeméride. Son la celebración de una historia construida colectivamente, del esfuerzo de miles de artistas que dedicaron su vida al escenario y del legado cultural que continúa vigente. Al mismo tiempo, este aniversario funciona como una invitación a renovar el compromiso con la excelencia y a seguir construyendo, desde la música, la danza y el canto, una institución que continúa siendo un faro cultural para la Argentina y el mundo.
