La música pop internacional y el fútbol argentino se cruzaron este domingo en un momento tan inesperado como celebrado por los fanáticos. La protagonista fue nada menos que Dua Lipa, la reconocida artista británica, quien decidió asistir al Superclásico entre Boca Juniors y River Plate, uno de los eventos deportivos más apasionantes y mediáticos del planeta.

Su presencia en La Bombonera, el mítico estadio del club xeneize, no pasó inadvertida. Desde que comenzaron los rumores sobre su posible asistencia, la expectativa creció tanto entre los hinchas como en las redes sociales. Y finalmente, la cantante confirmó su presencia de una forma que conquistó a todos: vistiendo la camiseta de la Selección Argentina, evitando así inclinarse por alguno de los dos gigantes del fútbol nacional.

Dua Lipa, que se encuentra en el país en el marco de una visita promocional y algunos compromisos artísticos, fue invitada por ambas instituciones. River Plate, primero, le había hecho llegar una camiseta oficial del equipo “millonario”, personalizada con el número 22 y su nombre en la espalda, como gesto de bienvenida y admiración. Sin embargo, poco después, Boca Juniors se sumó al juego y extendió una invitación formal para que presenciara el Superclásico en el estadio de La Boca.

Esa dualidad —la camiseta de River y la invitación de Boca— generó una ola de especulaciones. Durante horas, tanto los medios como los fanáticos se preguntaban cuál sería la decisión de la artista. Algunos imaginaban que optaría por quedarse al margen, mientras otros soñaban con verla en el templo xeneize. Finalmente, la incógnita se resolvió: Dua Lipa apareció en La Bombonera, sonriente y acompañada de su equipo, luciendo la camiseta celeste y blanca de la Selección Argentina, en un guiño elegante y diplomático que le permitió mantenerse al margen de cualquier favoritismo.

La imagen de la cantante ingresando al estadio fue rápidamente viralizada. Miles de usuarios en X (ex Twitter), Instagram y TikTok compartieron videos del momento. En ellos se la veía feliz, saludando al público, y con una energía contagiosa. Muchos fanáticos argentinos destacaron su decisión de elegir los colores nacionales, mientras que otros bromearon con que “eligió los colores de Racing Club” —en referencia al tradicional celeste y blanco de la “Academia”— para mantenerse neutral en la eterna rivalidad entre Boca y River.

Durante el desarrollo del encuentro, la estrella británica fue captada por las cámaras oficiales de la transmisión televisiva. La escena se dio a los 24 minutos del primer tiempo, cuando el marcador todavía mostraba un empate sin goles. La cámara enfocó el palco donde se encontraba Dua Lipa, quien observaba con atención las acciones dentro del campo de juego. Apenas notó que estaba siendo filmada, la artista reaccionó con simpatía: sonrió, se acomodó el cabello y acompañó con un leve movimiento de hombros el ritmo de los cánticos que resonaban en las tribunas. Esa breve pero encantadora reacción bastó para conquistar a los espectadores y convertirse en uno de los momentos más comentados del partido.

La Bombonera, fiel a su fama, ofreció una experiencia única. El estadio vibraba con la pasión característica del hincha bostero: las banderas flameaban, los bombos marcaban el pulso de la tarde y los cánticos retumbaban con fuerza en cada rincón. Dua Lipa, acostumbrada a llenar estadios con su música, se mostró fascinada por la intensidad del ambiente futbolero argentino. Testigos cercanos aseguraron que la cantante se mostró muy entusiasmada, intercambiando sonrisas con los presentes y filmando algunos momentos con su teléfono móvil.

Su presencia también fue interpretada como un nuevo ejemplo del creciente vínculo entre la cultura pop y el fútbol argentino, una relación que en los últimos años se ha intensificado gracias a la proyección internacional del país tras la conquista del Mundial de Qatar 2022. La elección de la camiseta de la Selección, más allá de su aparente neutralidad, simbolizó un reconocimiento al fenómeno global que representa hoy la “Scaloneta” y a la figura de Lionel Messi, ídolo universal incluso entre las estrellas de la música.

En paralelo, tanto Boca como River aprovecharon el episodio para sumar visibilidad en redes. Las cuentas oficiales de ambos clubes compartieron mensajes alusivos, celebrando que una figura internacional del calibre de Dua Lipa se interesara por vivir en persona la experiencia del Superclásico. Los seguidores de ambas instituciones, aunque con el humor y la picardía que caracteriza a los argentinos, coincidieron en que la visita de la cantante fue un orgullo y una muestra del atractivo que tiene el fútbol nacional más allá de sus fronteras.

Horas después del encuentro, los videos del momento en que la artista fue enfocada por la cámara ya acumulaban millones de reproducciones. Medios internacionales como BBC, The Guardian y Billboard se hicieron eco del hecho, destacando la pasión que despierta el fútbol argentino incluso entre las celebridades del mundo. En algunos portales británicos, los titulares resaltaban la “valiente decisión” de la cantante al adentrarse en una de las rivalidades más intensas del planeta sin tomar partido.

Más allá de la anécdota, la aparición de Dua Lipa en La Bombonera dejó una estampa difícil de olvidar: una artista de renombre mundial disfrutando, con sencillez y curiosidad, de una experiencia profundamente argentina. Sin estridencias ni protocolos, solo una camiseta albiceleste, una sonrisa y una tarde que combinó música, fútbol y emoción.

En definitiva, Dua Lipa no solo presenció un partido de fútbol: vivió un ritual cultural cargado de historia y sentimiento. Su elección de la camiseta de la Selección fue más que una decisión estética; fue una forma de rendir homenaje a la pasión que distingue a los argentinos. Y aunque su visita duró apenas unas horas, bastó para que quedara grabada en la memoria colectiva de quienes, dentro y fuera del país, ven en el Superclásico algo más que un simple enfrentamiento deportivo.

noviembre 10, 2025