En un clima de crisis económica y tensiones internas dentro de su espacio político, el presidente Javier Milei decidió relanzar su imagen pública y su campaña de reelección con un evento que combinó música en vivo, discurso ideológico y puesta en escena en el Movistar Arena, donde presentó su nuevo libro, «La construcción del milagro». Lo hizo con una actitud desafiante, retomando los elementos que le dieron notoriedad en su campaña de 2023: provocación, anticomunismo, y una mezcla de política con espectáculo.

El acto comenzó con una entrada teatral: luces apagadas, pantallas con explosiones de edificios y el tema “Panic Show” de La Renga como cortina sonora. Milei apareció en escena con energía exaltada, micrófono en mano y la banda presidencial preparada para acompañarlo en su peculiar intento de mezclar rock y política. El primer tema fue “Demoliendo Hoteles”, de Charly García, aunque con algunas letras modificadas al estilo libertario.

A pesar de la crisis social que atraviesa el país, con una inflación persistente y ajustes económicos que golpean a los sectores más vulnerables, el Presidente se mostró eufórico. En lugar de abordar directamente los problemas del día a día, optó por un discurso cargado de consignas ideológicas: habló de una “batalla cultural”, repitió sus críticas al “populismo” y llamó a no bajar los brazos. “Estamos a mitad de camino. No aflojen, que todavía tenemos que cruzar el río”, dijo ante una multitud de militantes y funcionarios oficialistas.

Milei volvió a prometer el fin de la inflación, y aseguró que su gestión ya ha logrado avances como la supuesta eliminación de la hiperinflación y el crecimiento del PBI. “Estoy haciendo ajustes que le sirven a la gente”, expresó, mientras aprovechaba el acto para enviar mensajes de campaña. De hecho, se animó a pedir el respaldo para su reelección hasta 2031, argumentando que, de concretarse, su gestión le devolvería “500 mil millones de dólares a los argentinos en impuestos”.

En las pantallas del estadio apareció una imagen suya junto al expresidente estadounidense Donald Trump, lo que generó una ovación del público. “Milei, querido, el pueblo está contigo”, coreaban los militantes. En ese contexto, aprovechó para arremeter contra el kirchnerismo con tono combativo: “¿Escuchás, kirchnerista? Pudiste ganar un round, pero no la batalla ni la guerra”.

El espectáculo fue compartido con figuras de su espacio, como su hermana Karina Milei —señalada en recientes denuncias por presuntas irregularidades en el manejo de fondos públicos—, y los diputados Joaquín y Bertie Benegas Lynch, quienes integran su banda musical. También participó Marcelo Duclós, autor de su biografía, y su esposa. A lo largo de la jornada, Milei se mostró activo en redes sociales, transmitiendo desde el estadio mientras presentaba a los músicos y técnicos con entusiasmo casi infantil.

El repertorio musical incluyó canciones populares argentinas y extranjeras, adaptadas con letras libertarias. Algunos temas fueron dedicados explícitamente a sus opositores, como Cristina Fernández de Kirchner, a quien aludió en tono burlón. En uno de los momentos más controvertidos, reinterpretó “Dame Fuego”, de Sandro, cantando: “Tira piedra, kuka tira piedra”, y proyectó videos donde parodiaba escenas de Star Wars, representando a CFK y Axel Kicillof como villanos.

El show también tuvo momentos de contenido internacional. Milei se refirió al conflicto en Medio Oriente y sostuvo que “la izquierda intenta aplicar xenofobia y antisemitismo”. En ese marco, expresó su respaldo a Israel, calificándolo como “el bastión de Occidente”. Para cerrar, rindió homenaje a las víctimas del 7 de octubre (en referencia a los ataques de Hamás), y proyectó imágenes de figuras como Alberto Nisman.

Pero el contexto político que rodeó el acto fue mucho más complejo de lo que el ambiente festivo del estadio dejaba entrever. En las horas previas, el Presidente se vio forzado a dar de baja a José Luis Espert de la lista de candidatos a diputados, debido a sus vínculos con el empresario Fred Machado, investigado por presuntas conexiones con el narcotráfico. Esta decisión, tomada a regañadientes y por presión del PRO y de aliados internos, alteró los planes de Milei y expuso las tensiones en su coalición.

El reemplazo de Espert como presidente de la Comisión de Presupuesto será Bertie Benegas Lynch, el mismo que tocaba la batería durante el show. En tanto, la lista en la provincia de Buenos Aires será encabezada por Diego Santilli, referente del PRO. Muchos militantes libertarios expresaron su incomodidad con este cambio, pero aseguraron que apoyarán la lista «por Milei».

La jornada también estuvo marcada por un importante despliegue de seguridad en las inmediaciones del estadio, con presencia de Gendarmería Nacional. Afuera, agrupaciones de izquierda se manifestaron en rechazo al gobierno, con pancartas como “Karina coimera” y “devuelvan la plata de los jubilados y discapacitados”. En las calles del barrio porteño de Villa Crespo también aparecieron carteles críticos: “Milei: El único milagro con vos es llegar a fin de mes”, en alusión al título del libro que presentó esa misma noche.

Antes del ingreso masivo al estadio, cientos de militantes oficialistas se congregaron en el Parque Los Andes. Allí se distribuyeron gorras, remeras y banderas con consignas contra el comunismo y el “wokismo”. Grupos como “Las Fuerzas del Cielo” y los “Karinistas” llegaron desde distintos puntos del país, desde Bahía Blanca hasta Santa Fe, para participar del acto. Algunos referentes libertarios, como Agustín Laje y Nahuel Sotelo, también tuvieron presencia destacada.

En medio del evento, el vocero presidencial Manuel Adorni lo entrevistó en el escenario. Milei insistió en que su gobierno va “por el camino correcto” y aseguró que a partir del 11 de diciembre (fecha simbólica de su primer aniversario como presidente) se vendrán nuevas “reformas estructurales”.

Mientras tanto, el ministro de Economía, Luis Caputo, se encontraba en Washington negociando con funcionarios cercanos a Donald Trump para conseguir un nuevo financiamiento que le permita sostener el dólar y aliviar las tensiones del mercado cambiario.

El show concluyó con la canción “Libre” de Nino Bravo, en una metáfora sobre el rumbo que Milei quiere darle al país. Sin embargo, para muchos observadores y ciudadanos, el contraste entre el espectáculo en el estadio y la difícil situación económica cotidiana fue más que evidente. Aunque para sus seguidores el acto representó una reafirmación ideológica y emocional, para sus detractores fue una puesta en escena vacía que buscó tapar con música y consignas una gestión cada vez más cuestionada.

octubre 7, 2025