En el marco del conflicto que enfrenta al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con el gremio de Camioneros, un episodio ocurrido en la noche del lunes generó tensión y visibilidad pública: un camión de la empresa Ashira, encargada de la recolección de residuos, volcó toda su carga sobre Avenida Belgrano, provocando una situación de desorden y malestar en la vía pública.
La respuesta oficial no se hizo esperar. El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, ordenó el retiro inmediato de los desechos y desplegó un operativo de limpieza durante la madrugada. A través de sus redes sociales, el mandatario porteño compartió imágenes de los trabajos y expresó: “Durante la madrugada los equipos de limpieza estuvieron trabajando en el lugar para restablecer rápido el orden y normalizar la zona”.
El incidente ocurrió en medio de la escalada de tensión entre el Ejecutivo porteño y el sindicato que lidera Pablo Moyano, luego de la decisión del Gobierno de la Ciudad de suspender la licitación del servicio de grúas de acarreo, medida que generó el rechazo del gremio. Aunque no se confirmó oficialmente que el hecho tenga relación directa con el conflicto gremial, la situación se produjo en un contexto de alta fricción.
Desde la empresa Ashira, responsable del camión involucrado, explicaron que la descarga del contenido en plena vía pública no fue un acto de protesta, sino una medida preventiva. Según informaron, los trabajadores detectaron un principio de incendio en la unidad, motivo por el cual decidieron volcar los residuos de manera inmediata para evitar mayores riesgos.
El incidente generó repercusión tanto en medios como en redes sociales, donde circularon imágenes del camión descargando basura en plena avenida. Si bien la situación fue controlada rápidamente, evidenció las tensiones que persisten entre el gobierno porteño y algunos sectores sindicales vinculados a los servicios urbanos.
La gestión de Jorge Macri atraviesa un escenario complejo en materia de servicios públicos y relaciones laborales, con el sindicato de Camioneros como uno de los principales actores en disputa. La puja por el control del sistema de grúas, que históricamente ha sido criticado por su opacidad y escasa renovación, se suma a otros focos de conflicto que Macri intenta enfrentar con una postura firme de reformas y cambios en los contratos heredados.
Por el momento, no se anunciaron sanciones a la empresa ni se abrió una investigación formal sobre el hecho, aunque desde la administración porteña se mantiene el seguimiento de la situación. La limpieza total de la zona se completó durante la madrugada del martes, y el tránsito por Avenida Belgrano ya se encuentra normalizado.
