La Ciudad Autónoma de Buenos Aires dio un paso significativo en el reconocimiento de una de las figuras más trascendentales de la historia médica argentina con la inauguración de la primera escultura dedicada al doctor René Favaloro. El homenaje, que se concretó en el barrio de Caballito, busca reafirmar el lugar del prestigioso cirujano cardiovascular en la memoria colectiva y destacar un legado que excede ampliamente los avances científicos para convertirse en un símbolo de ética, vocación social y compromiso con la salud pública.
La obra fue emplazada en la Plaza Paseo de la Vida, un espacio verde ubicado entre las calles Bacacay, Rojas y Nicolás Repetto, junto a las vías del ex Ferrocarril Sarmiento. Allí, vecinos y visitantes pueden encontrarse con el busto que representa al médico platense, cuya contribución revolucionó la cirugía cardíaca a nivel mundial y dejó una huella imborrable tanto en la Argentina como en el exterior.
La escultura fue realizada en cemento, un material elegido especialmente para garantizar su durabilidad frente a las condiciones climáticas y el paso del tiempo. El trabajo estuvo a cargo de Silvia Vera, artista del taller MOA (Monumentos y Obras de Arte), el organismo dependiente de la Ciudad que se dedica a la preservación del patrimonio escultórico urbano. Para concretar el busto, la escultora llevó adelante un proceso de investigación que se extendió durante cuatro meses, durante los cuales analizó fotografías históricas, registros audiovisuales y testimonios, con el objetivo de lograr una representación fiel y respetuosa de la figura de Favaloro.
Vera destacó la carga emocional que implicó la realización de la obra y el profundo compromiso que sintió al asumir la tarea. Según expresó, el proceso creativo estuvo atravesado por la empatía con la historia personal y profesional del médico, a quien definió como una persona excepcional. Además, manifestó su gratitud por la confianza depositada en ella para llevar adelante el primer homenaje escultórico dedicado a Favaloro en el espacio público porteño.
La iniciativa para rendir tributo al reconocido cirujano surgió dentro del propio equipo del MOA y tomó forma a partir de un pedido formal impulsado por la Comuna 6, con la intención de sumar a Caballito una intervención artística que evocara a una figura clave de la historia argentina. Desde el Gobierno de la Ciudad se subrayó el valor simbólico de la obra, resaltando que Favaloro encarna principios que trascienden el ámbito de la medicina, como la ética profesional, la cultura del esfuerzo, el trabajo comprometido y la responsabilidad social. Asimismo, se puso en valor que la escultura haya sido realizada íntegramente por profesionales del MOA, reafirmando la capacidad técnica y artística del organismo.
El lugar elegido para la instalación del busto tiene una fuerte carga simbólica. La plaza fue denominada en 2010 “Paseo de la Vida” mediante una ley sancionada por la Legislatura porteña. En aquel momento, no fue posible asignarle formalmente el nombre completo del médico debido a que no habían transcurrido diez años desde su fallecimiento, requisito establecido por la normativa vigente. Por ese motivo, se optó por una denominación provisoria que dejó abierta la posibilidad de incorporar posteriormente el nombre del doctor René Favaloro, decisión que hoy encuentra continuidad con la colocación de la escultura.
René Gerónimo Favaloro nació en 1923 en un contexto humilde de la ciudad de La Plata. Se formó como médico en la Universidad Nacional de La Plata, donde fue influenciado por docentes que promovían una concepción humanista de la medicina. Tras graduarse, eligió ejercer como médico rural en Jacinto Arauz, en la provincia de La Pampa, donde permaneció durante doce años. Allí desarrolló una intensa labor sanitaria junto a su hermano, creando un centro asistencial, impulsando campañas de prevención y logrando mejoras significativas en indicadores como la mortalidad infantil, la atención de partos y la nutrición de la población. También organizó un banco de sangre, una iniciativa innovadora para la región en aquel momento.
En 1962 decidió perfeccionarse en el exterior y viajó a los Estados Unidos para especializarse en la Cleveland Clinic. Fue allí donde, en 1967, desarrolló la técnica del bypass coronario utilizando la vena safena, un procedimiento que marcó un antes y un después en la cirugía cardiovascular y salvó millones de vidas en todo el mundo.
A pesar del reconocimiento internacional, Favaloro regresó a la Argentina en 1971 con el firme propósito de contribuir al desarrollo de la medicina nacional. En 1975 fundó la Fundación Favaloro, una institución dedicada a la asistencia médica, la investigación científica y la formación de profesionales, y más tarde impulsó la creación de la Universidad Favaloro. A lo largo de su trayectoria recibió innumerables premios y distinciones, pero su figura quedó especialmente asociada a valores como la honestidad, la coherencia ética y la excelencia profesional.
El busto fue realizado por el MOA, el taller responsable del cuidado y la restauración de más de 2.400 esculturas, monumentos y obras de arte distribuidas en el espacio público de la Ciudad. Fundado en 1956 y ubicado en la Plaza Sicilia, dentro del Parque Tres de Febrero, el edificio que alberga al MOA forma parte del patrimonio histórico porteño y tiene una larga historia ligada a la ciudad.
En octubre del año pasado, el taller reabrió sus puertas tras una renovación integral que permitió recuperar sus naves históricas, optimizar las condiciones laborales del equipo de restauradores e incorporar nuevos espacios destinados a la difusión cultural. Entre las mejoras se destaca la creación de un archivo patrimonial integrado, que reúne miles de fotografías, planos y fichas técnicas vinculadas a las obras y a las intervenciones realizadas a lo largo del tiempo.
Actualmente, el MOA puede ser visitado de lunes a viernes, de 10 a 17 horas. El acceso al patio de esculturas y al nuevo pabellón de exposiciones es libre, y quienes deseen realizar visitas guiadas pueden solicitarlas a través del correo electrónico oficial del organismo, con el objetivo de conocer de cerca el trabajo de preservación del patrimonio escultórico de la Ciudad.
