Ocho ministros provinciales de Desarrollo Social de distintas regiones y espacios políticos han expresado públicamente su profundo malestar y preocupación ante la ausencia de respuesta y coordinación por parte del Ministerio de Capital Humano, encabezado por la ministra Sandra Pettovello. En una carta conjunta, estos funcionarios exigen la inmediata convocatoria al Consejo Federal de Ministros de Desarrollo Social (CoFeDeSo) para establecer un “ágil cronograma de entrega” de alimentos próximos a vencer, que permanecen retenidos sin distribución, lo que genera un serio riesgo social y sanitario en varias provincias.

Entre los firmantes se encuentra Alfredo Menem, ministro de Desarrollo Social de La Rioja y familiar del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Sin embargo, a pesar de estos lazos familiares, Menem se encuentra alineado con el gabinete del gobernador Ricardo Quintela y ha adoptado una postura crítica hacia el gobierno nacional, coincidiendo con otros ministros en la demanda de una mayor responsabilidad y gestión efectiva por parte de la cartera nacional.

Los ministros remarcan en su comunicado que el problema no se reduce solo a la falta de diálogo, sino a la ausencia total de planificación y acción concreta. Aseguran que la ministra Pettovello no ha establecido ningún canal de comunicación fluido con las provincias, y subrayan la necesidad imperiosa de un intercambio institucional que permita organizar con eficacia la distribución de los alimentos que están próximos a perderse. Además, advierten que no se está coordinando la entrega de kits de invierno para las personas en situación de calle, un programa vital que resulta indispensable para enfrentar las bajas temperaturas y evitar tragedias, como la muerte de una persona por frío registrada recientemente.

A este reclamo se suma la crítica por el desfinanciamiento de otros programas sociales esenciales, como el de Primera Infancia, así como los planes “Mi Pieza” y “Mi Baño”, que están destinados a mejorar las condiciones habitacionales y urbanísticas en barrios populares. Los ministros también denunciaron que el Ministerio de Capital Humano no ha distribuido las camionetas destinadas a tareas de asistencia social, vehículos adquiridos durante la gestión anterior y que deberían estar operativas para apoyar el trabajo en terreno de los equipos provinciales.

El ministro bonaerense Andrés Larroque expresó en una conferencia de prensa que “es muy extraño que, estando ya en junio, no hayamos tenido ningún contacto con Pettovello”. Criticó la falta de gestión y calificó la situación como “una máquina de postergar”, al tiempo que señaló que ya llevan casi medio año de gobierno sin avances concretos en la materia.

Por su parte, Alfredo Menem destacó que la “situación social está mal” y cuestionó duramente al gobierno nacional, calificándolo como “un equipo de improvisados que no tiene gestión ni rumbo claro”. Alertó sobre la grave situación económica, señalando que diariamente se cierran industrias en las provincias y se producen despidos en comercios y en la construcción, producto de la paralización de la obra pública y la caída del consumo. En La Rioja, precisó, al menos 250 comedores y merenderos han tenido que cerrar sus puertas por falta de suministro de alimentos que debería haber enviado el Estado nacional.

Menem denunció también que el gobierno no ha facilitado la apertura del diálogo ni ha destinado fondos coparticipables para la asistencia social, la obra pública o la educación. “No tenemos absolutamente nada y la verdad es que es desesperante”, afirmó. Consideró que esta ausencia de respuestas podría generar un estallido social, debido a la deshumanización de la política y al creciente malestar que se vive en las provincias.

Otro de los ministros que se manifestó fue Fernando Meza, de Misiones, quien explicó que los ministros provinciales firmaron el comunicado con “humildad pero con la firme convicción de poder aportar a una correcta y ágil distribución de alimentos”. Meza denunció que la ministra Pettovello no responde a las solicitudes de diálogo, a diferencia de Pablo De la Torre, funcionario desplazado recientemente como responsable de la distribución fallida de alimentos, quien sí mantuvo cierto contacto con los ministros provinciales.

La retención de miles de toneladas de alimentos, adquiridos por la gestión anterior y que ahora corren riesgo de vencimiento, ha generado una fuerte polémica y preocupación social. Los ministros advirtieron que perder esa mercadería sería “casi un sacrilegio”, dado el elevado nivel de necesidades en distintos sectores de la población. Subrayaron que la asistencia actual es débil y que la demora en la entrega de recursos agrava la difícil situación de muchas familias que dependen de esos apoyos para subsistir.

Este reclamo conjunto pone en evidencia la profunda crisis de coordinación entre el gobierno nacional y los gobiernos provinciales, lo que amenaza con aumentar la vulnerabilidad de los sectores más desfavorecidos y exacerbar las tensiones sociales en un contexto económico y político ya complicado.

junio 4, 2024